
Baños de bosque, tendencia para disfrutar de la naturaleza
Los viajeros cada vez buscan más el contacto con la naturaleza. Por varias razones. Por un lado, los confinamientos sufridos nos han descubierto las ventajas del aire libre y puro. Por otro, cada vez somos más sostenibles y viajamos con conciencia para disfrutar de todo lo bueno que la naturaleza nos ofrece. Entre las muchas tendencias surgidas en esta línea hay una que merece una reseña especial ¿Has oído hablar alguna vez de los “baños de bosque”? Una actividad que invita a descubrir lo mejor de la naturaleza que es a la vez una terapia.

Os propongo daros un “baño de bosque”. Antes de explicar en qué consiste esta actividad voy a hacer un pequeño repaso por su origen.
Los baños de bosque nacen el Japón
La moda de los “baños de bosque” empezó en Japón. La presión que sufre gran parte de la población por el ritmo frenético y el exceso de trabajo incluso llegó a producir una enfermedad mortal llamada karoshi.
Contra ese mal la mejor terapia es entrar en contacto con la naturaleza y hacer un tratamiento purificante. Así nacieron los “baños de bosque”. Los llamados Shinrin-Yoku en su idioma. Una actividad que en Japón incluso se prescribe con receta médica para combatir el estrés y la depresión.
Hasta ahora eran fundamentalmente los japoneses quienes más practicaban los baños de bosque. Pero ahora que los destinos naturales se han puesto de moda, darse un baño de bosque es una actividad que gana adeptos día a día. Una experiencia que ya es tendencia en España.

Cabe destacar que es una experiencia fácil. Si de verdad tienes ganas de experimentarlo, no hace falta desplazarse muchos kilómetros para disfrutarla. Seguro que tienes algún bosque cerca de tu casa. Sólo hay que saber buscarlo. Rara es la ciudad de España que no tiene cerca alguna arboleda maravillosa donde desconectar del mundo.

¿En qué consiste un baño de bosque?.
Es muy fácil. Sólo hace falta buscar un bosque, calzarse un zapato cómodo y empezar a pasear. Pero ¡ojo!. No sólo hay que pasear. La clave de esta terapia se esconde en la capacidad de sentir la fuerza de la naturaleza. Eso requiere un pequeño entrenamiento previo.
Para hacer un buen baño de bosque hay que caminar despacio. Pararse de vez en cuando para observar cómo las hojas de los árboles se mueven con el viento. Seguir con los ojos el vuelo de una mariposa. Escuchar los sonidos de la naturaleza: los pájaros, grillos…
Paseo colorista por bosques
Insisto. Es muy importante dar esos paseo con todos los sentidos activos. Hay que dedicarle tiempo a oler los aromas de la tierra. Hay que pararse para contemplar las plantas que salen al paso, para mirar las flores… los colores. Justo el otoño es la mejor estación pues es cuando los árboles sacan sus mejores galas: ocres, amarillos, naranjas, rojos, verdes, marrones… ¡Están todos, la sinfonía de tonos al completo! Y para caminar una alfombra de hojas. Un espectáculo único que no te puedes perder. Pasear por un bosque en la estación más colorista es una delicia.
Si puedes, lo más recomendable es disfrutar en silencio del atardecer o del amanecer rodeado de vegetación. Todo eso hay que hacerlo sin prisa. Dedicando tiempo a lo que te rodea e interiorizando todas esas sensaciones que salen la paso.

Desconectar de la tecnología
Por supuesto hay que dar estos paseos sin teléfono móvil. Si no quieres dejarlo en casa por motivos de seguridad (y de orientación) prueba al menos a llevarlo apagado. Y no hagas una foto a cada paso. No. Mejor céntrate en disfrutar de lo que estás viviendo en ese instante, sin interferencias. Disfruta de lo real y huye de lo virtual que tanto daño nos hace.
Parece fácil pero no lo es. Por eso hay guías especializados en estos paseos de bosque que acompañan la experiencia con técnicas de relajación, con explicaciones sobre lo que no rodea… y que proponen paradas para aprender a respirar, para disfrutar del silencio.
Dicen los entendidos que debemos dedicarle al bosque un mínimo de 50 minutos, o una hora. Es el tiempo mínimo necesario para poder sentir la fuerza de la naturaleza en nuestro interior.
Aunque si eres de los afortunados que puedes olvidarte del reloj lo mejor es desconectar del mundo al menos durante tres o cuatro horas. Para que los efectos sean los mejores. Tranquilo, no tienes que estar todo el tiempo caminando. También puedes sentarte a observar, a escuchar… Se trata de que la naturaleza penetre en tu interior. Tú decides cómo conseguirlo.

Los efectos terapeúticos de los baños de bosque
Según los médicos japoneses, con estos paseos se consiguen muchos beneficios para la salud. Lo primero se reduce el estrés y eso se traduce en una mejora del sistema cardíaco y del inmunológico. Y por otro lado, es una actividad que ayuda a despertar la creatividad. En Japón los médicos se los prescriben a sus pacientes como un “medicamento” eficaz contra los males modernos.
La prueba es que hay en Japón más de cincuenta bosques habilitados para los” baños” y la idea es que esa lista siga creciendo. Parajes especialmente bien conservados y preparados para la práctica de esta actividad que hasta se incluye como obligatoria en muchas empresas. Raro es el congreso o meeting que no tiene en su programa unas horas diarias de desconexión y tiempo libre para esta práctica.

Dónde tomar baños de bosque en España
Tengo la suerte de vivir muy cerca de un bosque extenso y desde siempre me ha gustado perderme entre los árboles dando largos paseos. No me imaginaba que en realidad estaba disfrutando de una actividad por la que muchos viajeros asiáticos pagan. Y mucho. Muchos japoneses tienen en cuenta si hay bosques cerca de los lugares que visitan cuando salen de casa.
Disfrutar de paseos en distintos bosques del mundo se ha convertido en una afición para muchos viajeros que eligen sus destinos en función de la posibilidad de darse buenos y frondosos baños de bosque. Y hay lugares en el mundo que ya se promocionan en base a esa demanda.
España sin duda es buen lugar para la práctica de esta actividad. Se cuenta que hace siglos una ardilla podía cruzar España saltando de árbol en árbol. Hoy en día todavía quedan lugares donde esa leyenda se cumple.

Visita a Muniellos en Asturias
Por ejemplo en un viaje a Asturias, una de las CC.AA. con más espacios naturales protegidos. Entre ellos uno que es perfecto para darse estos baños de bosque. Muniellos. Una reserva donde se conserva la esencia de lo que fue el norte de España hace siglos. Un bosque de los de película, rebosante de vegetación. Denso y oscuro. Donde los rayos del sol tienen que atravesar mil obstáculos para conquistar las entrañas de este salvaje rincón de Asturias, de verde intenso.
Mientras se pasea bajo la sombra de los robles centenarios -algunos con más de siete metros de perímetro- el visitante percibe que se encuentra en uno de esos lugares que parece que sólo existen en la imaginación. No cabe duda. Es casi un milagro que Muniellos se conserve como está. Por eso está protegido como Reserva Integral de la Biosfera, distintivo que concede la UNESCO a donde se conservan la diversidad biológica y las formas tradicionales de explotación de los recursos naturales.
Eso sí, para entrar en Muniellos hay que pedir permiso previo al Principado de Asturias. Sólo se permite el acceso de 20 personas diarias y una misma persona solo se puede acceder una vez al año.

Hayedo de Jordá, árboles sobre lava en Girona
Es un hermoso bosque escondido en la comarca de la Garrtoxa, en la provincia de Girona. El árbol dominante es el haya aunque hay también se ven robles y castaños. A parte de ser un lugar bellísimo es muy curioso. Toda la arboleda se sitúa sobre mar de lava, la colada surgida tras la erupción del volcán Croscat. Sí. Es que el interior de esta comarca oculta en el interior de la provincia es una zona volcánica llena de paisajes muy especiales.
El hayedo de Jordá es uno de los puntos fuertes de este rincón. Sorprende saber que el suelo sobre el que crecen los árboles está hueco, un efecto creado por las burbujas de aire que la lava dejo en el camino.
Al pasear por las muchas rutas posibles se camina sobre un revoltijo de raíces, una alfombra de hojas secas y rocas de aspecto extraño. La luz se filtra entre las ramas y los rayos crean efectos extraños. Yo tuve la suerte de recorrerlo sola, y esa sensación de soledad en este paraje fue mágica.

Paseos entre laurisilva en Canarias
En un viaje por Islas Canarias verás que en muchas de ellas se da un fenómeno especial. Los bosques de laurisilva, la vegetación más antigua de la tierra. Su origen debemos buscarlo en la era terciaria, es decir, hace millones de años. Para que te hagas una idea, es el bosque por donde habitaban los dinosaurios. Y que ya ha desaparecido, sólo se conserva en algunas islas canarias, en Madeira y en pocos lugares más.
En estos bosques repletos de árboles de troncos y raíces retorcidas, arbustos milenarios, suelos cubiertos por musgos. Helechos gigantes y lianas colgantes uno se siente inmerso en un cuento mitológico. No te extrañe si te sale al paso algún gnomo, hadas o algún ser de forma extraña. Este es su paraíso, seguro. Buen lugar donde dejar volar la imaginación.

Bosques frente al mar en Galicia
Cierro con una reseña al bosque que tengo cerca de mi casa. En A Coruña donde hay muchos espacios repletos de árboles que en muchos casos llegan hasta el mar. Ver cómo la luz del atardecer se filtra entre las ramas y los bailes de rojizos que asoman ante los ojos es un todo un espectáculo.
Yo sin saberlo llevo haciendo baños de bosque muchos años. Y ahora que sé que además es una actividad sana, terapéutica y anti estrés voy a pasear mucho más.
¿Y tú, tienes bosques cerca de casa por donde pasear? ¿Te apuntas a darte unos baños de bosque este verano?
Podcast de Nani Arenas en La SER


3 Comments
laviajeraempedernida
Hola Esther, en el post menciono algunos. Pero si me dices donde vives quizá pueda buscas opciones adaptadas a tu zona. Un abrazo.
Esther
No tenía idea de que se llamaba “baños de bosque” pero la naturaleza me encanta desde siempre, adoro ir a pasear por el blosuqe, caminar con mis perros y despejarme, creo que es la mejor manera que hay. Tal y como dices en el post, no es tan fácil encontrar un bosque de este tipo, ¿Podrías recomendarme alguno que merezca la pena?
Céline
Buenas tardes Nani,
Yo soy una de esas guías de baños de bosque que mencionas en el artículo
Gracias por difundir esta maravillosa práctica y ayudar a que sea un poco más conocida.
Te invito a pasarte por mi blog, allí he escrito un par de artículos sobre los baños de bosque, con unas infografías a modo de resumen (quizás te interese compartirlas, sin compromiso).
Igual que tú, yo también me acerco al amanecer o al anochecer a las maravillosas zonas verdes que tenemos en Vigo desde donde observar el mar… Lo hacía antes de formarme como guía y ahora lo hago mucho más es una experiencia muy relajante.
Y antes de despedirme, decirte que también por las Rías Baixas tenemos sitios fantásticos donde hacer baños de bosque. Mi preferido es el Parque Natural do Monte Aloia. Te lo recomiendo si no lo conoces.
Lo dicho, gracias por el artículo y a ver si pasa todo esto rápido para poder volver al bosque!!