
Cerdeña, una isla que no te puedes perder
Son muchos los viajeros que confirman que existe un lugar mágico y hermoso donde conviven paisajes impresionantes, aguas translúcidas, arena blanca, yacimientos arqueológicos y mucho más. Ese lugar se llama Cerdeña y ocupa un puesto muy alto en la lista de sitios que creo deben visitarse al menos una vez en la vida. Una isla italiana que es única. Seas como seas y viajes como viajes, es un destino que tienes que incluir en tu lista de deseos.

Si te animas a visitar Cerdeña, lo primero comentarte que la mejor forma de llegar a la isla es en Ferry. Hay varias opciones pero la más recomendable es la oferta de los transbordadores para Cerdeña con Ok-Ferry, en los que puedes viajar en tu propio coche, auto-caravana…
Este detalle es muy importante pues recorrer Cerdeña en tu vehículo te permitirá acceder los rincones más perdidos y bellos de la isla. Y todo hay que decirlo, la isla no presume por tener un óptimo sistema de transporte público. Y la demanda de coches de alquiler es alta y por tanto en cara. Por tanto, creo que este es un buen consejo a tener en cuanta a la hora de organizar tu viaje a este paraíso mediterráneo.

Paseo por la historia de Cerdeña
Una vez en tierra, atentos. Cerdeña es una isla muy grande y tiene muchas ciudades importantes y monumentales, pero sobre todo cientos de pequeños pueblos llenos de historia.
Por supuesto, urbes como Cagliari, Alghero, la Maddalena o Castelsardo son destinos de visita obligada. Todas comparten una estampa idílica, protagonizada por multitud de torres, iglesias, catedrales, casas coloridas, ruinas romanas y mucho más. Huellas de todas las civilizaciones y culturas que han pasado por allí.
Pasear y disfrutar de un descanso degustando una copa de Mirto acompañada de alguno de sus quesos típicos. Charlar con la gente local. O disfrutar de las cálidas noches, del casi permanente ambiente festivo, pasear entre yates de lujo en Porto Cevo… Son sólo algunas de las experiencias recomendables en Cerdeña.

Relax en aguas cristalinas
Tras recorrer las ciudades toca ¡por supuesto! darse un buen baño en el mar Mediterráneo, famoso en esta zona por su limpieza m sus colores turquesas y su transparencia.
No olvides que esta isla presume por ser una reserva natural y está llena de rutas panorámicas, de montañas, grutas y cuevas, de puertos y por supuesto, hay muchas playas, calas y golfos donde tumbarse al sol, disfrutar de la naturaleza y muy importante, recargar las pilas. Pequeños ejemplos de toda la belleza de la isla.
Así que no lo dudes. Si viajas a Cerdeña reserva días suficientes para poder aprovechar el tiempo y disfrutar de toda esa magia. La vía más rápida es mediante un barco y recorrer la costa paraíso, la costa Esmeralda y la costa Dorada. ¿Apetecible verdad?



One Comment
SantiMB
Sin duda un tesoro de isla. Recomiendo un mínimo de dos semanas para ver lo básico. La gastronomía tradicional de la isla vale tanto o más que sus playas o su cultura. También es recomendable visitarla en época de carnavales, sobre todo el centro de la isla. Son unos carnavales únicos, diferentes.