
Qué comprar en Brujas, la Venecia de Flandes
Brujas. Una de las ciudades indispensables de Flandes. Es difícil ponerle calificativos. Doy fe de que esa buena fama que tiene es muy cierta. Pero aparte de monumental y coqueta, es también un destino donde disfrutar paseando, haciendo deporte o pasando una fantástica tarde de compras. La oferta comercial de Brujas es tan preciosista como su estética y lo mejor, hay muchas tiendas pequeñas que ofrecen productos locales “hechos en Brujas” perfecto para quienes huyan de la invasión de las grandes multinacionales. ¿Me acompañas en esta ruta para shopaholics?
Nos vamos de visita a Brujas es una ciudad pequeña y manejable, ideal para caminar sin rumbo y perderse por sus callejuelas. Hermosa como salta al a vista. Acogedora cual maqueta. Cómoda y ¡dulce, muy dulce!, especialmente por la cantidad de chocolaterías y rutas dedicadas al placer de la buena gastronomía.

Los imprescindibles de Brujas
Pero hoy no me voy a detener en la belleza de los canales que atraviesan Brujas, y que la convierten en una pequeña Venecia. Ni voy a hablar los jardines secretos que se esconden en sus orillas. Temas ya muy tratados en otros reportajes y blogs.

No voy a contaros tampoco detalles históricos sobre los muchos monumentos que decoran un casco histórico de origen medieval, impecable y protegido por la Unesco.

Ni voy a recomendaros que recorráis las calles del centro en un coche de caballos como hacen tantos visitantes.

Ni que subáis los 366 escalones que llevan a la cima de la Torre del Campanario en la Plaza Mayor (Markt) para contemplar la mejor panorámica de la urbe.

No os voy a sugerir que os hagáis una foto con el artista flamenco Jan Van Eyck, cuya escultura reina frente a uno de los canales. O que os bebáis una cerveza local (una Brugse zot, por ejemplo, que es una de las más solicitadas) en cualquiera de las muchas terrazas de la plaza Burg, donde se ubica el Ayuntamiento.
No os voy a reñir si os vais sin saludar a la majestuosa y a la vez delicada escultura de mármol blanco de la “Virgen con el niño”, obra de Miguel Ángel, que reina en la imponente iglesia de Nuestra Señora, la cual también presume por tener la segunda torre de ladrillo más alta del mundo.

No, no os voy a hablar de todas esas maravillas. Ni os voy a dar datos sobre la historia de Brujas, sobre su pasado nobiliario. Ni una palabra sobre sus museos. Ni sobre el origen gremial de sus casas de tejados escalonados.

No voy a dedicar palabras a de todo eso pues creo que es la información que aparece siempre en cualquier guía. O lo que todo viajero descubre casi por si solo cuando llega a Brujas. Ya con la primera mirada, nada más bajar del tren (el mejor medio de transporte para llegar a Brujas y moverse por todo Flandes) uno percibe que está en un lugar muy especial.
LO TÍPICO DE BRUJAS CON UN GUÍA EN EN ESPAÑOL
Si quieres ver lo mejor de Brujas ten en cuenta que la ciudad tiene tanto que ofrecer que abruma. Por eso recomiendo hacer siempre una visita guiada, con alguien que hable español, conocedor de todos los secretos de la ciudad.
Merece la pena. Brujas es un destino que debe exprimirse a tope. Reserva tu recorrido a la carta en este enlace y ¡disfruta de la ciudad más bella de Flandes"
Las mejores tiendas de Brujas
Voy a hablaros de otro aspecto. De una ruta quizá menos conocida pero para mi muy recomendable. Os invito a dar un paseo por las llamadas tiendas “Hand Made un Brugge”. O lo que es lo mismo, a recorrer Brujas siguiendo un plano en el que se localizan establecimientos de diseñadores locales, pequeños comerciantes o artesanos. Que venden productos exclusivos, diferentes y de elaboración propia.

Para mi must en cualquier ciudad, pues creo que esos pequeños comercios son los que diferencian a unos destinos de otros, los que aportan personalidad a todas esas ciudades absorbidas por la globalidad y conquistadas por las grandes marcas y cadenas internacionales. A mi me gusta buscar lo diferenciador y en Brujas lo he encontrado.

Por eso me gusta tanto esta marca. Un paraguas bajo el que encontramos de todo. Tiendas de ropa, de lencería, de chocolate, de bicicletas artesanas, joyerías, zapaterías, tiendas con objetos de segunda mano, galerías de arte, decoración, papelerías, panaderías, museos…
Lo mejor de todo es que mientras las localizas (todos los establecimientos están señalizados en un plano con todos los detalles de interés) descubres otras calles de Brujas por las cuales seguramente no habrías pasado. Y a la vez visitas los rincones más turísticos. Las tiendas están repartidas por toda la ciudad.

Lencería, zapatos, bicicletas, bombones…
Os cuento algunas de las más me han gustado. Mi favorita sin duda, la tienda de lencería de Sun Mae. Ideal no solo para mujeres sino también para viajeros que busquen ideas para hacer un regalo exquisito a su pareja. Creo que me compraría todo lo que vende esta diseñadora.

He visto también zapaterías (siento debilidad por los zapatos) fantásticas, pero el escaparate que mas me conquistó fue el de Hoet, en Vlamingstraat. ¡Me lo compraría todo!

Si te gusta la música, hay también tiendas de instrumentos. De bisutería. ¡De bicicletas! De bombones. Y no faltan ejemplos de productos artesanos como el encaje, típico en Flandes y famoso en Brujas.

Si no tienes el plano a mano, no te preocupes. Sabrás si estás comprando en una tienda “hand nade in Brugge” si ves este distintivo en el escaparate.

Productos únicos, especiales y cercanos
Y cuando compres un producto así catalogado ten en cuenta que estás adquiriendo algo único y especial, y de calidad. No olvides que no sólo es un producto, detrás de todos estas prendas, objetos, postres… hay una historia. Recuerda que como son productos artesanos, son “customizables“, es decir, pueden adaptártelos a tus gustos y necesidades. No dudes en consultar.
Sabes al momento de dónde es originario el producto, dónde se ha producido. Muy importante, con tu compra ayudas a impulsar la economía local. Siempre sabes a quién reclamar si sale defectuoso o no cumple con tus expectativas. Lo más probable es que sea el propio creador quien te lo haya vendido.

En fin. No me extiendo más. Pero si vas a Brujas y quieres comprar algo especial para ti o para regalar a alguien a quien aprecias, no lo dudes. Primero visita todo lo típico y luego, deja unas horas para perderte por esos rincones más apartados y llévate un recuerdo “hand made in Brugge“.


3 Comments
Pilar
Ahora ya sí que tengo excusa para volver a Brujas… con lo que me gusta a mí el shopping. Muy interesante ya que sí que ví esas tiendas tan cuquis, pero no sabía que hubiera una ruta y todo.. Si te animas a pasarte por mi Blog www. nomecabeenlamaleta.com, me hará mucha ilusión
DinkyViajeros
Guardamos este post en favoritos para preparar nuestro viaje a Bélgica en Octubre… 🙂
carmen b
Me ha encantado tu post! En mi recorrido por Brujas vi alguna de esas tiendas aunque algunas cierran un poco pronto para mi gusto… acostumbrada a los horarios de España….Así que no me dió tiempo a hacer muchas compras después del recorrido turístico. Si a alguien le interesa leer más sobre el Brujas turístico le espero en mi blog. Un saludo.