Llega el verano, la mejor estación para el disfrute de actividades acuáticas. Ir a la playa y respirar el aire del mar es cada vez más divertido. Este año además va a ser una necesidad para muchas personas tras la cuarentena. El cuerpo nos pide aire puro, vitamina D y actividad física pero a ser posible en solitario. Hay que huir de las aglomeraciones y buscar ideas para el disfrute del mar casi en soledad. Aquí una lista con algunas actividades que encajan en este perfil, y que tenido la suerte de practicar o contemplar en los últimos meses.

Antes en las costas se practicaba el típico «sol y playa», segmento del cual el turismo español vivió durante muchos años. Ahora las cosas han cambiado. Ya no sólo queremos tumbarnos en la toalla a absorber vitamina D. La gente demanda actividad. Y la lista de actividades que se pueden practicar en la playa aumentan día a día.
Las ventajas de estas opciones es que son casi todas para solitarios o se practican en grupos muy reducidos, justo lo que necesitamos este verano en el que todo lo que hagamos va estar influenciado por el coronavirus. A continuación una lista de actividades para solitarios en las que se respeta la distancia social a la vez que se disfruta de los beneficios del sol y del mar.
1. Surf de remo o paddle surf
Es una de las actividades que más ha crecido en los últimos años. Es un deporte que cada vez se practica más en playas donde hay poco oleaje y el mar está tranquilo. Consiste en navegar sobre una tabla de surf impulsándose con la ayuda de un remo. Lo mejor, es que se puede hacer solo, que es lo mormal, pero también se puede plantear como un juego y practicarlo con niños como compañeros.
En muchas playas ya se ofrece la opción de alquiler de tablas por horas y ver la silueta los paddle surfistas en el agua es ya escena habitual.

Además no sólo se practica en el mar. También se puede disfrutar de esta el paddle surf en ríos, en ciudades con canales navegables como por ejemplo en Gante (Flandes, Bélgica) donde capté esta imagen el pasado verano.

2 – Surf clásico
¿Por qué no? Si veraneas en una playa con oleaje merece la pena intentarlo. Cada vez hay más escuelas de surf donde tomar esas primeras lecciones, cuanto antes, mejor. Y luego, ¡al agua y suerte! ¿Has probado alguna vez, lo recomiendas?.

Eso sí, antes es importante tener en cuenta que el surf es un deporte duro y es necesario llevar la ropa adecuada, especialmente si lo practicas en el norte de España donde hay buenas olas pero el agua suele estar muy fría. Por tanto, mejor equiparse con un buen neopreno que también protege de los golpes de la tabla.
Para hacer surf es necesario estar pendiente de las mareas y de las olas. Los principiantes mejor intentarlo con la mar pequeña. Las olas grandes son peligrosas y mejor dejárselas a los más experimentados.
El surf se practica sólo, aunque lo normal es que los grupos de amigas se agrupen para charlar mientras esperan que llegue la ola perfecta.

3 – Kite-Surf
Es en deporte de moda sobre todo en zonas con mucho viento. La escena de decenas de velas de colores decorando el cielo es cada vez más habitual en ciertas playas.
Ver como estas grandes cometas vuelan mientras los surfistas hacen equilibrios en la tabla es muy entretenido, aunque intuyo que lo mejor debe ser probar la experiencia y animarse a practicar el también llamado fly-surf. Yo por ahora no me he animado. ¿Tú sí? ¿Lo recomiendas?
En la imagen, fly surf en la playa Guincho, en Portugal (provincia de Cascais). Uno de los paraísos para la práctica de este deporte.

4 – Un paseo en patín o pedaleta
Patines, patinetes, pedaletas… ¿Cómo las llamas tú? Tienen muchos nombres posibles que varían según la zona geográfica. Pero son una opción clásica y fantástica para pasar una hora agradable navegando, pedaleando. Y con un poco de suerte, tirándose por un tobogán, opción que ya han incorporado muchas empresas.
Los precios varían según el tiempo y la playa en cuestión, y suelen tener capacidad para cuatro personas, que es lo que cubre el seguro. Por tanto el aforo perfecto para disfrutar en petit comité del mar.

5 – Y ¿en barco? (en velero o de motor)
La navegación deportiva es una de las actividades más solitarias que hay. Y a no ser que dispongas de un gran yate, en general son siempre para grupos muy reducidos.
¿No tienes un barco, ni un amigo que tenga barco? No pasa nada. Rara es la costa donde no se pueden alquilar barcos (con o sin patrón patrón) con los que surcar los mares del lugar donde te encuentres. Y es muy recomendable.
Hace poco tuve la suerte de vivir la experiencia de navegar con unos amigos por las Islas Cíes, en Pontevedra Galicia. Fue una experiencia maravillosa que podéis ver resumida en este video. Espero que os guste.
Si no puedes pasarte un fin de semana en un barco no pasa nada. También puedas dar un paseo más corto en catamarán, o en un velero, en un barco turístico… las opciones pueden ser miles pero lo que busco es transmitir es la sensación de navegar, vivir una experiencia acuática y disfrutar del mar.
Otra de mis mis experiencias navegando fue en la costa de Croacia. ¡Maravilloso! Para que lo tengas en cuenta cuando la movilidad vuelva a la normalidad.

Elijas la forma y el barco que elijas, es una experiencia muy recomendable, también si viajas con niños. En la imagen, un paseo tranquilo en familia en un catamarán por la costa de Valencia.

6- Hacer snorkle
Es una actividad también para solitarios que debe practicarse en zonas con aguas muy limpias. Muy recomendable si te gusta ver peces y descubrir la belleza de los fondos marinos.
Si tienes suerte y estás en una playa donde haya coral, ni lo dudes. Nadar mientras contemplas las extrañas formaciones rocosas de colores que decoran el fondo de muchos mares es una experiencia muy muy recomendable.

7 – Kayak y canoas de mar
Navegar en piragua, en una canoa hinchable o en un kayak de mar es otra de esas actividades divertidas que no necesitan mucho entrenamiento ni mucha compañía. Suelen ser para una o dos personas. Y sólo hace falta tener una embarcación a mano (también es fácil encontrarlas de alquier) y animarse a remar. Eso sí, no es fácil. Remar tiene su ciencia y cansa.
Con esta actividad se accede a rincones en la costa como cuevas, cascadas, calas donde parar para darse un baño… completamente solo.

8 – Bucear entre delfines
Se puede bicear en varios puntos de la costa española donde puedes hacer inmersiones para ver peces, plantas y hasta pecios (barcos hundidos). En las Baleares y en Canarias hay muchos puntos de inmersión y tambiñen escuenas donde hacer el bautismo de buceo pues ojo. Es una actividad que no puede practicar cualquiera. Para explorar el fondo de los mares con una bombona de oxígeno tienes que pasar un cursillo y disponer de una licencia que te indique a que profundidad puedes sumergirte. No es una actividad sencilla ni apta para todos los públicos.
Yo no tengo licencia de buceo pero si he tenido la suerte de hacer alguna inmersión acompañada de un monitor. La vez que más disfruté fue una vez que tuve la oportunidad de bucear con delfines en Eilat. ¡Increible!.

Lo mejor de aquella experiencia fue que la viví con mis hijas en un viaje en familia por Israel. Fue maravilloso hacer en aquellas aguas cálidas nuestro «bautismo de buceo» (con botella de oxígeno) y sumergirnos con delfines.
Es fácil. No hay más que ponerse el ajustado traje de neopreno, ajustar bien las botellas de oxígeno y tener bien colocado todo lo necesario para respirar sin problema bajo el agua. Y muy importante. Atender bien explicaciones del monitor que te acompaña en la aventura submarina y dejarte llevar. Una de las reglas más importantes del buceo es bajar acompañado, y si no tienes licencia la actividad se hace siempre en compañía de un monitor.

Una vez bajo el agua, ¡parece un sueño!. La contemplación de la colorista fauna marina, nadar entre arrecifes de coral... Buenos complementos a la experiencia de conquistar el fondo del mar con delfines como anfitriones quienes por cierto, siempre dedican más de una pirueta a sus apreciados visitantes. ¡Una experiencia fascinante!
9 – ¡A pescar!
Es la actividad favorita de los más pacientes y de las almas solitarias. Pasar horas y horas con la caña esperando, solo, a que piquen, afición que cada día tiene más adeptos. Se puede pescar con caña en la costa, salir a pescar en un barco…

La clave es saber qué se pesca (hay quien práctica la pesca sin muerte) y pedir los permisos necesarios, licencias, tener conocimiento de las vedas y de lo qué se puede pescar, información que varía según la ciudad, el país, la época del año…
Se puede pescar el ríos, en el mar... y hay quien viaja para pescar a países lejanos. Por ejemplo a pescar salmón en Noruega. Otra idea para el final del confinamiento.
10 – Vuelo de cometas
Si el día amanece ventoso y nublado, no pasa nada. Coge una cometa y lánzala al viento mientras corres por la arena. Ojo, parece fácil pero no lo es tanto, su dominio requiere cierta práctica. Y es otra actividad bastante solitaria pues puedes ir solo con tu cometa y pasarte horas disfrutando de este juego.
En la imagen, cometas en una playa en Zelanda (Holanda).

11 – Esculturas de arena
Otro clásico. En las playas más turísticas es ya habitual encontrar a escultores de arena que crean elaborados conjuntos con arena y agua. Hay verdaderas obras de arte que si se cuidan bien, humedeciéndose se manera casi constante, duran muchos días. ¿Y si pruebas a hacer una? Es un reto que también puedes afrontar sin compañía alguna.
En la imagen, escultura de arena en Baiona (Vigo, Galicia)

12 – Caminar por la playa
Es mi actividad favorita. Caminar por la playa al borde del mar, con los pies a remojo. Disfrutando de la brisa del mar, del fresquito del agua, y con un objetivo.
Hacer ejercicio a la vez que intento alcanzar los 10.000 pasos diarios, el mínimo necesario para, dicen los especialistas, estar en forma.

¿Qué actividad practicas tú? ¿Alguna experiencia que añadir a esta lista con sabor a verano y a salitre?
Hace poco un artículo sobre team building en el Estrella digital y me dio algunas ideas sobre qué hacer esta semana santa. Lo digo por si alguien también se anima.
Muy buen blog y fantásticas fotografías
¡Para los más sedentarios nunca viene mal una baraja de cartas en la mochila!
Otras actividades inherentes al verano, aparte de las que se puedan realizar en las playas, son las presentes en las fiestas populares
Echo en falta las clásicas palas, juego habitual y tradicional de las playas vascas y cántabras.
Saludos,
David Mora
http://www.emoturismo.com