
El Camino Inglés: peregrina de Ferrol a Santiago
El Camino de Santiago. Sin duda, uno de los productos turísticos más exitosos del mundo. Son millones los peregrinos que en los últimos años han caminado hasta la plaza del Obradoiro desde diversos puntos repartidos por toda la geografía española y europea.

El Camino Francés es quizás el más conocido y el más popular. Y el recorrido entre Roncesvalles y la capital gallega es el preferido del mayor número de peregrinos. Pero con el paso de los años, poco a poco se han ido desarrollando caminos alternativos que atraviesan otras zonas como es el Camino del Norte, que discurre paralelo al mar cantábrico; el Portugués que atraviesa el país vecino; el Primitivo con Oviedo como punto de partida… y el llamado Camino Inglés, utilizado por ingleses e irlandeses que arribaban a tierras gallegas en barco (preferiblemente a los puertos de A Coruña o Ferrol) desde donde iniciaban su peregrinación hasta la tumba del Apóstol. Una costumbre muy típica en el siglo XIV y a principios del siglo XV.

Y justo este último es el que voy a emprender. A lo largo de los próximos días iniciaré un peregrinaje a pie desde Ferrol hasta Santiago. Un total de 127 kilómetros que salvaré en las cinco etapas estipuladas para este camino:
Ferrol- Neda (14 km)
Neda – Miño (23 km)
Miño – Bruma (38 km)
Bruma – Sigueiro (30 km)
Sigueiro – Santiago (18 km)
¿Y por qué el Camino Inglés?
Por varias razones.
1: No tengo mucho tiempo. Sólo dispongo de menos de una semana y el Camino Inglés, el cual puede hacerse en cinco etapas, cubre los kilómetros justos para ganar la deseada Compostela, la cual exige haber cubierto al menos, los últimos cien kilómetros a Santiago a pie, a caballo o en bicicleta.
2: Este camino no sólo atraviesa una zona de Galicia muy bella y muy desconocida sino que tiene un encanto que para mi ha sido decisivo: tiene tramos que corren paralelos al mar y al menos a mi caminar mientras contemplo algunas de las playas más bellas de la provincia me encanta.
3: Es un camino poco masificado. Casi casi perfecto para almas solitarias. Eso tiene su lado bueno y su lado malo. El bueno es que al caminar casi solo, sientes más el camino. Todo parece más auténtico. El malo, la falta de infraestructuras tales como albergues, restaurantes… lo que obliga al peregrino a plantearse opciones alternativas como la necesidad de tener que dormir en hoteles o ser previsor en lo que a la comida y a la bebida se refiere.
- Es una alternativa nueva y me fascina descubrir cosas y vivir experiencias diferentes.
Por tanto, aquí estoy preparando todo para iniciar mi peregrinaje: mochila, calzado cómodo, capa para la lluvia, algún fruto seco, mudas, un par de camisetas, un pantalón de repuesto, un mini botiquín con tiritas, compeed (apósitos espaciales para caminantes), un imperdible para pinchar las posibles ampollas que salgan al paso… (ya he sido peregrina en anteriores ocasiones y se bien lo que se sufre) y ¡como no mi cámara de fotos y mi Ipad. Ya. Estos dos últimos no son habituales en un peregrino pero, es que lo confieso, yo tampoco soy una peregrina de las típicas. Yo soy una peregrina periodista y mi tarea es no sólo disfrutar con esta experiencia sino también compartirla para facilitar la tarea a todos aquellos que quieran vivir esta misma aventura. Aunque esa tarea suponga llevar peso de más en la mochila. ¿Quién dijo que ser periodista de viajes fuera tarea sencilla?
Así que ya sabéis. En los próximos días (si el camino y el bendito wifi me lo permiten) relataré mi experiencia como peregrina en el Camino Inglés. Tanto a través del blog, donde intentaré actualizar los post siempre que pueda como a través de mis perfiles en Twitter, Facebook e Instagram (naniarenas)
Y ahora, voy a terminar de preparar todo para poner rumbo a Ferrol, mi punto de partida.
¿Algún consejo de última hora que deba tener en cuenta?
¿Quieres compartir conmigo tu experiencia como peregrino en este u otro camino?


3 Comments
miguel rial
Animo y a por ello…. si de verdad te gusta andar a la orilla del mar preparate para otro año el camino portugues por la costa yo lo hice desde la guardia y las tres primeras etapas a la orilla del mar espectaculares y muy poca gente asta que se junta en redondela con el otro camino portugues en redondela. Buen camino
Paco Piniella
Para alguien como yo que no hace mucha marcha, parece una buena forma de empezar a hacer el Camino.
Muy bonitas las fotos, enhorabuena por tu blog.
Saludos desde el blog de viajes El LoBo BoBo.0
José Antonio Gil Martínez
Hola.
Te iré siguiendo desde aquí y con tu permiso te dejaré algún consejo o recomendación aquí o en el FB.
La primera etapa hasta Neda es sencilla. Pasarás por el monasterio de San Martiño de Xubia o de Couto, que merece la pena rodearlo y evitando las ortigas contemplar su bonita cabecera románica.
Unos kilómetros después, llegarás hasta un molino de mareas tras el cual, y por un bonito paseo marítimo, llegarás hasta el albergue de Neda.
Buen Camino 😉