
El Príncipe de Asturias, el Aurora, el Myflower, el Britannia y más barcos míticos
El viernes 13 de diciembre de 2014, los ferrolanos han dejado de ver atracado en sus astilleros al portaaviones “Príncipe de Asturias”. Su estampa formaba parte de la estética de la ciudad desde el pasado febrero y desde entonces fueron muchos los nostálgicos que se acercaron a esta capital gallega para ver de cerca al mítico buque de la Armada Española.
Pero las historias siempre tienen un final. Y hoy se escribe la última página del Príncipe de Asturias que oficialmente se retira tras 25 años de servicio. Si sus paredes hablasen, contarían que el buque fue testigo vivo en el conflicto del Golfo Pérsico, en la guerra en la antigua Yugoslavia… y también en otras expediciones más agradables como el II Centenario de la Batalla de Trafalgar en 2005.
Pero la última aventura del portaaviones será ver como le desguazan. Esta imagen de Ferrol con el “Príncipe de Asturias” en sus astilleros (tomada ayer) pasará a la historia.
La retirada del buque ha despertado cierta polémica pues han sido muchos los defensores de que se quedase en Ferrol permanentemente y se abriese al público. También se estudió la posibilidad de hundirlo cerca de la costa y convertirlo en un pecio. Lamentablemente, los números no salían y al final el desguace fue la opción más rentable económicamente hablando.
Quiero despedirme del Príncipe de Asturias haciendo un recorrido por otos barcos míticos cuyo peso histórico ha sido clave a la hora de decidir que se conservasen como “reclamos turísticos” en distintos lugares del mundo.
El Aurora en San Petersburgo
El más famoso, bajo mi punto de vista es “El Aurora”, el cual sigue anclado en el río Neva, en San Petersburgo (Rusia). Se conserva tal cual estaba cuando Lenin hizo aquel disparo histórico (un 7 de noviembre de 1917) que anunció el ataque Palacio de Invierno. Fue el principio del fin de los Romanov, el desenlace de la Rusia de los zares, el inicio un nuevo poder en el Kremlin. Casi un siglo después, la visita al Aurora es clave para quienes quieran profundizar en la historia de la ciudad y por su cubierta pasan al año miles de curiosos y nostálgicos de la revolución bolchevique.
El submarino de Bremerhaven
Quienes prefieran subirse a un submarino auténtico de la II Guerra Mundial pueden poner rumbo a Bremerhaven (Bremen) en el norte de Alemania.
La visita al interior de esta nave es un poco claustrofóbica a la par que curiosa. Pensar que la tripulación se pasaba allí semanas sin salir a la superficie es ¡increíble!
Visita al Britannia, el barco favorito de Isabel II
Mítico es también el Britannia, el que fue barco de la familia real británica desde 1954 hasta 1997, año este en que se convirtió en museo flotante atracado en el puerto de Leith, en Edimburgo (Escocia). Resulta especialmente curioso visitar la habitación donde dormía la reina Isabel II.
El mítico Myflower
Y por último (aunque podría seguir hablando de barcos míticos visitables) cruzo el charco en busca del Myflower, barco en el que viajaron los primeros colonos ingleses que llegaron a EE.UU.
La nave partió desde Plymouth (sur de Inglaterra) un 6 de septiembre de 1620 y atracó en las costas de Massachusetts un 11 de noviembre.
Actualmente se conserva una réplica exacta del original en un pueblo costero de Massachusett, al este de Estados Unidos, también llamado Plymouth en homenaje a aquellos primeros “peregrinos”. A solo unas dos horas de Boston. El llamado Mayflower II. El auténtico se desmanteló tres años después de la primera expedición. El Mayflower II se construyó en 1957 y fue un regalo del Reino Unido a EE.UU.
¿Y tí, que barco mítico has visitado que nos puedas recomendar?

2 Comments
Muriel
Es incomparable el príncipe de Asturias con el Aurora. El portaaviones es conocido sólo por algunos españoles y sólo para nosotros tiene un significado simbólico no como el Aurora y el resto de barcos de los que hablas realmente referencias para aquellos a quienes nos guste todo lo naval.
El príncipe de Asturias se irá a un desguace pero a quienes os guste este mundo os recomiendo una ruta por el naval de Ferrol. Y la visita al museo naval. Imprescindibles para frikis enamorados del mundo de la marina
Juan C. Zapatero
El Victory del Almirante Nelson en la batalla de Trafalgar. Esta en dique seco en el Historic Dockyard de Porstmouth. Se visita de arriba a abajo, todas las cubiertas, desde la zona de Nelson y los oficiales hasta la línea de flotación. Resultan impactantes las cubiertas de los cañones con los techos muy bajos y en las que resulta facil imaginar la angustia en combate de aquellos hombres.