
Qué ver imprescindible en Dresden, la “Florencia” de Alemania del este
Dresden es uno de los destinos imprescindibles que debes visitar en un viaje por Alemania. Se sitúa en la aún hoy llamada Alemania del Este, en la orilla del río Elba. Y es también conocida como “la “Florencia del norte” por su increíble patrimonio artístico. Sin embargo su nombre se ha escrito en los libros de historia por un trágico suceso. Dresde sufrió el peor bombardeo de la II Guerra Mundial, superior incluso al de Hiroshima. Todo quedó destruido. El balance de víctimas se cuantificó en 135.000 muertos, aunque en algunos documentos se habla de más de he 250.000 víctimas mortales.

Al llegar a Dresden impresiona saber que las calles por donde paseamos fueron escenario del peor bombardeo aliado de toda la contienda sobre una capital alemana durante la II Guerra Mundial.
Los bombardeos de Dresden
Un trágico y a la vez polémico suceso acontecido la fatídica noche del 13 al 14 de febrero de 1945. Durante horas, la aviación aliada (formada por británicos y estadounidenses) atacó la ciudad y todo quedó reducido a cenizas. En cuestión de horas desaparecieron el ochenta por ciento de los edificios históricos de la esta bella localidad, también conocida como “la Florencia del Elba“.
UNA NOVELA PARA ENTENDER LOS BOMBARDEOS DE DRESDE
Si quieres saber más sobre lo acontecido la noche de la destrucción de Dresde puedes leer la “Matadero 5” de Kurt Vonnegut. Un libro peculiar en el que se describe lo experiencia vivida por un superviviente al bombardeo pero con extraño relato con elementos de ciencia ficción.

Dresden: la Florencia del Elba
Antes de aquel suceso Dresde era un paraíso arquitectónico. Un museo vivo donde reinaban algunos de los más hermosos edificios de Alemania: casas medievales de madera, plazas, iglesias monumentales y paredes decoradas con piezas de la fina porcelana que se elaboraba en la zona. Todo quedó reducido a cenizas en una sola noche.

RESERVA AQUÍ TUS ACTIVIDADES EN DRESDEN
¿Te apetece hacer una visita guiada con un acompañante experto?
¿Quieres un pase para visitar los museos? ¿Un freetour por las huellas de la IIGM?
¿Quieres contratar tus traslados desde y hasta el aeropuerto? Todo lo que necesitas para organizar tu escapada a Dresden en este enlace, y en español.
La historia de la Frauenkirche
Por suerte, hoy en día el casco histórico de Dresden ha resucitado. La prueba más evidente de la recuperación de Dresden la tenemos al contemplar la Frauenkirche, la iglesia de la ciudad, situada en la Nuemarkt.
Este templo ardió completamente la noche de los bombardeos. Dos días más tarde se derrumbó la cúpula. Así estuvo, en ruinas durante 40 años. Sus escombros decoraron la plaza hasta el año 1990 cuando se aprobó la reconstrucción de la iglesia gracias al empeño de un ejemplar movimiento ciudadano. Un grupo de vecinos de la localidad quienes, unidos, lograron recaudar ¡cien de los ciento treinta millones de euros! necesarios para afrontar la obra.
Gracias a toda documentación existente, la iglesia pudo reconstruirse exactamente igual a la original. Y hoy en día luce de nuevo como antaño. Se ha convertido en un símbolo. Y a la vez es un testigo en memoria de los dramáticos acontecimientos que Dresden nunca va a olvidar. Cuando la contemplas dan ganas de postrarse ante la que hoy un icono para los locales, para los visitantes y para la historia de Alemania.

EL MERCADILLO DE NAVIDAD MÁS ANTIGUO DE EUROPA
En Navidad, frente a la Frauenkirche se instala el mercadillo de Striezelmarkt, el cual presume por ser el más antiguo de Europa. Según los documentos conservados se celebra desde el año 1434.

El desfile de los príncipes
Hay otro lugar icónico en la ciudad por su belleza y por su significado. Cerca de la Frauenkirche está otro de los rincones más representativos de Dresden. El impresionante “desfile de los príncipes“. Un mosaico formado por más de veinticinco mil azulejos de porcelana de Meissen que adornan una de las paredes del Palacio Real. Parte de esta maravilla sobrevivió a las llamas del fatídico día. Uno de pocos tesoros que se salvó.
Llaman la atención no solo su belleza sino también sus colosales dimensiones. Atento: Mide 102 metros de largo, supera los nueve metros de altura. Su superficie total roza los mil metros cuadrados.

La rehabilitación de Dresden
Pero por suerte, Dresden logrado renacer de sus cenizas. Primero se rehabilitó la iglesia, luego el mencionado mosaico. Y poco a poco la ciudad fue recuperando el esplendor de antaño. Si visitas hoy la capital de Sajonia comprobarás que ya todo su patrimonio brilla de nuevo.
Mientras paseas por las avenidas y paseos del casco histórico un consejo. Fíjate en las monumentales fachadas de las aristocráticas mansiones que hay por toda la ciudad. Y en los ahora de nuevo impecables edificios culturales. Por ejemplo la ópera Semper, situada en la del teatro. O la catedral católica, con su marcado estilo gótico. O la Hofkirche, con vistas a la plaza del Palacio.

La huella del comunismo
La imagen cambia en cuanto te alejas del centro histórico. Tras los bombardeos, Dresden creció por los alrededores de la Frauenkirche. Por eso, al llegar a la calle comercial, la llamada Prager Strasse, de pronto la ciudad monumental desaparece. Y asoma ante la mirada una zona más gris, austera y funcional. La imagen típica de la RDA (Alemania comunista o del Este), bloque al que Dresden perteneció en los años de la Guerra Fría.

A medida que te alejas del centro se multiplican las construcciones típicas de la época soviética. Superlativos edificios prefabricados, barrios enteros con aspecto de colmenas gigantes, con fachadas de colores grises. Frías, impersonales. Tristes… El algunos casos se ve como, hoy en día, los vecinos han intentado darle otra imagen a las fachadas incorporando elementos decorativos o estructuras arquitectónicas más modernas. Pero la esencia de los cuarenta años de dominio comunista aún late con fuerza.

El barrio industrial de Neustat
La imagen de Dresden cambia de nuevo al llegar a la zona denominada Neustat. Es la parte nueva de la urbe, ubicada en la orilla opuesta del río Elba. Es la parte construida durante la época de Revolución Industrial. Y hoy en día se ha convertido en el barrio donde se han instalado los estudiantes, los jóvenes profesionales, las familias… que le dan ese agradable toque bohemio que a mi tanto me gusta.
Es una zona perfecta para pasear, para tomar algo en alguno de los encantadores cafés o pequeños restaurantes que salen al paso. Hay también mucha vida cultural: teatros, galerías de arte… y pequeños comercios con personalidad, por ejemplo tiendas de ropa y de objetos de segunda mano.


El callejón más alternativo de Dresde
Otro rincón que merece la pena visitar es el callejón del arte, el Kunsthofpassage. Un curioso pasadizo que se sitúa entre el 70 de Alaunstrasse y el 21 de la calle Görlitzerstrasse.
Es un pequeño laberinto formado por patios varios decorados con murales que ya presumen como ejemplo de arte urbano original y alternativo. Poco a poco han ido abriendo tiendas, cafés… y el lugar se ha puesto de mod entre jóvenes que se acercan a tomar algo por las noches. El ambiente está asegurado los fines de semana.

La lechería más bonita del mundo
Cerca del Neustat encontramos otra visita obligada. Otro rincón especial que logró sobrevivir a los bombardeos. Una lechería que presume por ser la más bonita del mundo, ubicada en el 79 de la calle Bautzner.
Seguro te quedas boquiabierto al contemplar esas paredes decoradas con azulejos de porcelana neorenacentista, rebosantes de imágenes de flores, de seres celestiales, de motivos rurales y animales… Prepara la cámara pues te vas a volver loco.


Todo está intacto, casi igual a como era en 1879 cuando un ganadero local llamado Paul Gustav Leander Pfund decidió abrir el establecimiento para dispensar leche fresca a la gente.
Al parecer, en sus inicios había una zona de la lechería donde se ordeñaban las vacas en directo. Durante el dominio soviético la lechería se nacionalizó pero se conservó al estar catalogada como monumento. Hoy en día sigue abierta al público y vende lácteos y quesos.

Museos de Dresden
¿Te gusta el arte? Pues entonces aprovecha para visitar los museos de Dresden. Para ello volvemos al centro histórico donde encontramos el más importante, situado en el castillo residencial. Donde se pueden visitar las bóvedas verdes (Historisches Grünes Gewölbe).
Un conjunto de galerías subterráneas donde se conserva y exhibe parte de la colección de obras de arte del príncipe Augusto II de Sajonia. Se contabilizan más de tres mil piezas de gran vaor que abarcan desde joyas y piedras preciosas a vasijas y menaje de oro, curiosas miniaturas de ámbar, objetos varios de coral y nácar… Sin duda interesante.


Los angelotes de Rafael
Otra visita recomendable es la Gemäldegalerie Alte Meister. Una pinacoteca con una gran colección de pintura antigua. No dejes de contemplar la famosa Madonna Sixtina de Rafael, la cual ha vuelto a Dresden tras pasar muchos años en Moscú. Una de las pinturas más famosas del artista italiano y mundialmente conocida por los famosos querubines que se ven en la parte inferior del cuadro.
Los amantes de la pintura moderna pueden poner en la ruta una visita al recién renovado y ampliado museo de Albertinum, ubicado en la que antaño fue la armería de Dresden.
El Dresden más moderno
No todo en Dresden huele a pasado. Hay también ejemplos de de modernidad como por ejemplo, la Estación Central de tren, la Hauptbanhof. Si llegas en tren a la ciudad fíjate en el tejado, reconstruido por arquitecto británico Norman Foster.

Dresden, única ciudad eliminada de la lista de la Unesco
En Dresden también hay construcciones polémicas. El discutido puente del Waldschlösschen, construido sobre el río Elba. Una obra que enfadó mucho a la Unesco.
El rechazo ante esta estructura de cuatro carriles que une las dos orillas del Elba por parte de la organización fue tan marcado que tuvo un triste final. Tras varias advertencias y amenazas se cumplió el peor escenario. Dresden fue eliminada de la lista de Patrimonio de la Humanidad, ranking del que la ciudad formaba parte desde el 2004. No solo por el daño que el puente causó a su patrimonio histórico, sino también por el paisaje cultural que se extiende a orillas del río repleto de palacios barrocos y jardines monumentales.
SABÍAS QUÉ…
Dresden ha sido la única ciudad del mundo expulsada de la lista de Patrimonio de la Unesco. Sólo el Santuario del Oryx Árabe de Omán fue excluido en en 2007- Pero en este caso fue una solicitud voluntaria lanzada por el país para poder explotar sus plataformas petrolíferas.
Qué comer en Dresden
¿El paseo te ha abierto el apetito? Pues atento a los platos más típicos: las patatas y las salchichas, dos ingredientes básicos que aparecen en casi todas las recetas. Así, por ejemplo es casi obligado probar la kartoffel suppe (sopa de salchicha), un entrante habitual en los fríos inviernos de Dresde.
También habitual es la llamada dresdner saverbraten. Un plato elaborado con carne de ternera bañada en salsa y pasas. Entre los postres, es muy recomendable el sächsische quarkkeulchen, o sea, tortitas de requesón. Y como acompañamiento, no dejes de probar alguno de los vinos locales. Una sorpresa.


12 Comments
Josep Alegre
Estuvimos este verano, pasando un día por el centro histórico. La gente muy amable con nosotros. Quedé muy muy impresionado con las reconstrucciones; la Frauenkirche, el Zwingerhof, etc.. es encomiable e indescriptible el propósito de estos ciudadanos por recuperar lo que se llevó la locura de la guerra. Por cierto, la Gemäldegalerie, un maravilloso museo de pinturas. Recuerdo los Cranach, Rafael, Canalettos, Rubens..
Si vais, no os perdais la vista de la ciudad desde el otro lado del rio. En fin, sólo fueron unas horas allí, pero me dejaron más huella que varios días en otras capitales..
javier sucunza castells
Y eso que habria mucho, pero mucho que hablar sobre la necesidad de tal bombardeo y del de muchas otras ciudades en la SGM.
Pablo Rocco
Que increíble experiencia… me encantaría estar ahí, muy bellas fotos, que increibles construcciones! soy de Chile, pero no he estado ahí, igual al viajar por otros países y ciudades es conveniente tener un mapa, información de locales o lugares para visitar, su sitio web es increíble en ese sentido 😀 felicitaciones.
Si vas de paseo o turisteando o de mochilero por Chile, en especial por San Felipe o Los Andes en la región de Valparaíso, te recomiendo ingresar al sitio de dondepuedo.cl encontrarás desde campings, restaurantes, lugares para turistear y todo tipo de locales!
http://www.dondepuedo.cl
Visita Chile, San Felipe y Los Andes!!
Alberto (Notas de un viajero)
Es muy curioso entrar en las iglesias (se nota mucho en la Frauenkirche) y ver que el mármol no es mármol sino paredes pintadas que lo simulan. También impresiona ver que dentro de las iglesias conservaron (también se nota mucho en la Frauenkirche) el escaso metro de piedra que quedó en pie de las paredes tras el bombardeo, tienen un color muy distinto al resto.
Un saludo.
Amadeu Miquel Amalrich
Muy recomendable, la Florencia del Elba. La obra maestra del Zwinger, la Staatsoper Semper Oper, la Frauenkirche blanca y luminosa … Ah ! y un paseo en los octogenarios barcos de palas laterales para pasar bajo el puente azul, y mas allá …
el viajero impresionista
Todavía se aprecian las huellas de “Bombardero” Harris en el centro de la ciudad, que aún hoy está terminando de reconstruirse. Varios edificios históricos se han levantado de nuevo. Vale la pena una visita. Saludos.
María Pilar Queralt
Descubrí Dresde cuado escribía mi novela “Los espejos de Fernando VII”ya que allí nació la segunda esposa del rey, Josefa Amalia de Sajona. una señora más triste que un sauce, beata como pocas (el Papa tuvo que intervenir para que se consumara el matrimonio con el rey…) y poetisa aficionada, que reinó como consorte en españa durante diez años. La señora, como veis, no es demasiado interesante, pero la ciudad es una maravilla absolutamente recomendable.
Gracias Nani por recordarlo.