
Las historias que merecen un avión de Vueling
La “customización” de aviones está de moda. En los últimos años hemos visto como algunas compañías aéreas revolucionaban el cielo decorando sus naves con mensajes publicitarios varios, tema del que ya he hablado en posts anteriores.
El marketing en este campo avanza y el siguiente paso es crear concursos para bautizar aviones. En los últimos meses ya hemos visto iniciativas similares de varias aerolíneas. Entre ellas Vueling, que se apunta a la moda del storytelling buscando nombres e historias ejemplares con las que bautizar su nueva flota.
Me explico mejor. La campaña se basa en la búsqueda de historias únicas de personas anónimas, de gente de la calle como tú y como yo, que haya hecho algo especial en su vida. Historias, en definitiva, de héroes desconocidos, protagonistas de una iniciativa ejemplar. Promotores de una historia tan hermosa que merezca que un avión lleve su nombre y que a la vez ayuden a transmitir la fuerza y la magia del ser humano.

Algunos de estos nombres ya figuran en algunos de los aviones de Vueling. Y sus historias ya circulan por la red. Encontramos algunas ya conocidas como la del fotógrafo Bob Carey, quien lleva ya tiempo provocando las sonrisas de medio mundo con su campaña titulada “Tutu Project”. Una ocurrencia divertida, con un tutú rosa y un hombre normal como protagonistas, cuyo objetivo es provocar la sonrisa de gente que por distintas razones no tiene muchos motivos para reír. Una hermosa campaña cuyo nombre ya luce en uno de los aviones de la nueva flota de vueling.
Hay más. La verdad es que es esta una iniciativa es muy conmovedora. Y está llena de más historias que merecen la pena ser conocidas como la de Miguel Ángel Galán, presidente de una escuela de fútbol en Getafe. O la de Arelis y Carlos Vásquez, dueños de una lavandería en Manhattan… ¿Por qué no la tuya?
En Vueling buscan héroes entre la gente de la calle. Y las historias más hermosas volarán por los cielos impresas en alguno de los aviones de la compañía. ¿Te gustaría ver tu nombre en uno de ellos? Hay aún ocho naves aún esperando ser bautizadas. ¿Por qué no el tuyo, tu proyecto, tu sueño?

Venga ¡anímate!. Si eres protagonista de alguna acción de la que crees puedes sentirte orgulloso no lo dudes. O si conoces a alguien, algún amigo, cuya historia creas debe merecer un avión, lánzate. Envíasela a la gente de Vueling. Y si la historia gusta, bautizarán uno de sus aviones con ella. Además, los autores del envío ganarán un vuelo para dos personas a cualquier destino Vueling.
Asimismo, si las historias seleccionadas hasta ahora te llegan al corazón y crees que merecen ser conocidas ¡compártelas! Desde Vueling me informan que quienes colaboren con la difusión de de estas historias con el hastag #HistoriasQueMerecenUnAvion podrán ganar un vuelo a una ciudad de Europa para una persona.
Yo por mi parte, estoy deseando conocer esas historias de héroes desconocidos que merecen ser descubiertas, a ver si se produce un efecto contagio.
Apura pues el plazo acaba el domingo 6 de diciembre. La cuenta atrás ha empezado. Vuela. ¡Anímate y suerte!
Post realizado para apoyar la campaña de Vueling voluntariamente, sin matiz promocional. La intención es difundir el interés de una propuesta que considero interesante.

