
Lugares maravillosos: el libro con el que aprendí a viajar
Cuando hay una efeméride sobre acontecimientos importantes en la historia de España de la Transición y me preguntan ¿qué hacía yo aquel día? tengo clara la respuesta. Casi seguro estaría leyendo este libro que quizá os suene a los de mi generación. “Lugares maravillosos”, el 10 de la colección “El mundo de los niños”. Si habéis ido a EGB este post quizá os traiga muy buenos recuerdos.

Fueron mis compañeros de viaje en mi infancia. Eran 15 libros, cada uno dedicado a temas varios: Cuentos y Poesías; el 1, Las plantas el 6, cómo funcionan las cosas el 7, cómo soy yo el 14… manualidades (hazlo tu mismo) el 11… pero había uno, el 10, titulado “Lugares maravillosos” que a mi me me tenía hechizada.

Trataba, como os podéis imaginar, sobre viajes. Era un recorrido por algunos de los lugares más increíbles del mundo. Todo dividido en capítulos según temáticas: Las 7 maravillas del mundo antiguo; dónde se gobierna, tumbas y sepulcros famosos, lugares embrujados, sitios raros y curiosos…
Me se la introducción de memoria:
“Cuéntame algo de otros lugares del mundo.
Lugares lejanos o cercanos, antiguos o modernos, ricos o pobres, montañosos o llanos, océanos o ríos, montañas o valles, lugares silenciosos, lugares bulliciosos, lugares curiosos.
Este libro te guiará por el mundo y te hará conocer muchos lugares famosos”.

El primer contacto con lugares increíbles
En este libro vi por primera vez imágenes de muchos destinos a los que juré iría a ver con mis propios ojos alguna vez en mi vida. Descubrí leyendas increíbles e historias que me permitieron soñar durante muchos años. Vi en estas páginas la silueta del Empire State building por primera vez en mi vida. El majestuoso salón de los espejos del palacio de Versalles.

Descubrí que había en Inglaterra un sitio muy muy misterioso llamado Stonehenge. Que Holanda era un país extraño que había ganado tierra al mar. Y que en un lugar perdido en Italia había una curiosa ¡torre inclinada! que se hundía más y más cada año.¿Llegará a desaparecer? me preguntaba.

Leyendas y héroes
Conocí al héroe de Suiza, Guillermo Tell y temblaba al pensar que habría pasado si hubiese fallado aquel mítico disparo dirigido a la manzana sobre la cabeza de su hijo. Y deseaba con todas mis fuerzas poder comer algún día en el interior de ese átomo gigante llamado “Atomium” que según el libro estaba en Bruselas.

Poco a poco fui creciendo y empecé a viajar físicamente. Curiosamente, muchos de aquellos primeros viajes fueron para visitar lugares que tenía idealizados por que salían en mi querido libro. Quizá la “conquista” a la bahía de Mont Saint Michel fue una de las que más me llenaron, pues creo que la página dedicada a esa fortaleza escondida en la costa de la Bretaña francesa fue una de las que más me habían fascinado de todo el libro. ¡Cuántas horas pasé contemplando esta estampa y leyendo la historia de aquel “abad que era comandante”!

Hace unos años rescaté el libro de una estantería y empecé a señalar en las páginas los lugares que ya había visitado tras media vida viajando. Curiosamente, descubrí que me faltaban muchos, muchísimos. Más de medio libro sigue siendo territorio sin conquistar.

Esos destinos soñados que me faltan por conocer
Por ejemplo, no he estado aún en la Gran Muralla China. Ni he podido ir nunca al misterioso pantano y reserva natural de Okefenokee en Georgia y Florida en EE.UU que tantas pesadillas me produjo en mi adolescencia. Tampoco he visitado nunca en el Taj Majal en la India ni he pisado todavía la llanura y Parque Natural del Serengueti, en Tanzania.

Mi objetivo es lograr, algún día, hacer pleno. Y poner un punto azul en todas, TODAS, las hojas de este libro que confieso, es mi biblia viajera. 309 páginas como reto.
Y a ti. ¿Qué libros te han contagiado el gusanillo de los viajes en tu infancia, adolescencia?
Y si perteneces, como yo y como muchos de los lectores de este blog, a la ya mítica generación que fue a EGB… ¡confiesa! ¿A que también te gustaba mucho este libro?


2 Comments
Isabel
A mí también me fascinaba el libro Lugares Maravillosos, y tengo grabadas sus imágenes de tantas horas que pasé mirándolo y soñando con visitar esos “lugares maravillosos”. Poco a poco voy recorriendo el mundo siempre inspirada por ese libro. Un saludo.
pilar f.c.
a mi el que me gustaba era el de hazlo tu mismo, el verde creo. Me fascinaba! Y se podría decir que sí, que soy una persona creativa, así que cada uno le gustaba lo que le gustaba ejejej.
… le tengo que preguntar a mi madre si aún están por algun lado. 🙂