
Ruta por los imprescindibles que ver en Granada
Granada es una de las ciudades imprescindibles en un viaje por España. Famosa por La Alhambra, monumental palacio que presume por ser un crisol donde conviven huellas árabes, gitanas, también cristianas, castellanas… No te pierdas sus alrededores ubicados en una zona de acceso libre y abiertos a todo el mundo, donde también puedes visitar el Palacio de Carlos V. Pero hay en Graná más reclamos. Por ejemplo la Catedral donde yacen los Reyes Católicos. O barrios pintorescos como el Sacromonte. O el Albaicín, con sus calles y plazas siempre llenas de gente.

Bienvenidos a Granada, visita imprescindible en un viaje por Andalucía. Ciudad que, seguro, os va a conquistar pues es una de las joyas imprescindibles de España. Pero un destino donde es MUY IMPORTANTE ser previsor. Las visitas a sus más preciados monumentos requieren un poco de planificación por los aforos limitados y por la gran afluencia de gente en ciertas épocas del año.

A continuación una guía útil para que puedas organizar tu escapada a Granada de la mejor forma posible.

Entradas para la Alhambra con antelación
Efectivamente, al llegar a Granada siempre hay un primer objetivo claro: Visitar la Alhambra. Pero es IMPORTANTE advertir que este placer sólo está al alcance de los viajeros más previsores. Pues para acceder a las zonas más monumentales del palacio es necesario solicitar la visita con ¡meses de antelación!.
Por tanto, no lo dudes, si no quieres irte de la ciudad sin recorrer los jardines, los patios y escuchar el agradable sonido del agua en las fuentes de este gran palacio, reserva cuanto antes el acceso.
RESERVA ENTRADA A LA ALHAMBRA CON ANTELACIÓN
Reserva aquí YA tu entrada con visita guiada incluida a la Alhambra. Es la única forma de entrar. Mi consejo es que no te lo pienses mucho pues las entradas se venden como rosquillas. No esperes. Cuanto más previsor seas, más posibilidades tienes de disfrutar de esta maravilla.

El Palacio de Carlos V en Granada
Si no has sido lo suficientemente previsor y te has quedado sin plaza para visitar la Alhambra, no te preocupes. Granada tiene muchos más reclamos. Infinitos. Más rincones que visitar y que no te puedes perder.

Para empezar, en el mismo recinto de la Alhambra puedes visitar los alrededores del palacio. Hay zonas de libre acceso para las cuales no es necesario pedir permiso previo, ni comprar entradas. Por ejemplo, el curioso palacio del emperador Carlos V, nieto de los Reyes Católicos.

Digo curioso pues a llama mucho la atención su patio interior de forma circular. Está situado en un lateral de la Alhambra. Es un edificio de estilo renacentista que, el que fue el emperador español, ordenó construir tras su boda con Isabel de Portugal, con el fin de tener una residencia acorde a su cargo en la ciudad. Sin embargo, nunca llegó a vivir en este lugar.

Alrededor del Palacio de Carlos V también puedes pasear por la placeta de los Aljibes, contemplar los jardines del patio de Machuca. Y lo mejor, asomarte al balcón desde donde contemplar las más hermosas panorámicas del barrio del Albaicín, situado justo en frente.

Dormir en el parador frente a la Alhambra
Puedes también visitar el Parador, situado en el mismo recinto palaciego. El mejor lugar donde hacer parada y fonda en tu viaje a Granada. Y el mejor hotel para dormir si buscas alojamiento al lado de la Alhambra.

Al lado del Parador, no dejes de visitar la Iglesia de los Franciscanos y la estancia donde reposaron, provisionalmente, los cuerpos de los Reyes Católicos mientras finalizaban su mausoleo en la catedral.

Una vez recorrida la zona de libre acceso, mi consejo es que salgas de La Alhambra por la llamada Puerta de la Justicia.

Y que bajes, caminando, por la cuesta de Gomérez, la calle que te lleva directa desde La Alhambra hasta el centro de la ciudad.

La catedral y tumba de los Reyes Católicos
Seguimos la visita más histórica y toca ahora dirigirse a la Catedral. En realidad sería más exacto decir “conjunto monumental” pues está formado por tres edificios independientes entre si: la catedral, la iglesia del Sagrario y Capilla Real. Entre todos dan forma uno de los templos más grandes de Europa.
Para empezar, aconsejo detenerse en la contemplación de la fachada principal, situada en la plaza de las Pasiegas. Sencilla y elegante, presume por ser la primera iglesia renacentista de España.

En este conjunto cabe destacar la llamada Capilla Real, donde descansan los cuerpos de los Reyes Católicos, Isabel y Fernando. Quizá los monarcas más importantes de la historia de España.
A su lado reposan también los restos de su hija Juana la Loca y su marido Felipe el Hermoso. Llama la atención también el pequeño pequeño ataúd que completa el grupo, donde yace el infante Miguel de la Paz de Portugal. Nieto los reyes de Castilla y Aragón el cual falleció a los tempranos dos años de edad.

En la sala anexa encontramos una pequeña exposición donde se exhiben trajes de los monarcas, objetos personales de los allí enterrados y pinturas que pertenecieron a la reina Isabel.

LOS SECRETOS DE LA CATEDRAL DE GRANADA!
Descubre todos los secretos de la catedral de Granada y de la tumba de los Reyes Católicos con una visita guiada en español. Muy recomendable sobre todo si te interesa conocer los detalles más curiosos y las leyendas que esconde este complejo monumental.

La catedral se ubica en una zona de Granada denominada la Alcaicería. Un entramado de calles comerciales creadas alrededor del viejo zoco y donde puedes ver varias fachadas de origen morisco.

De tapas por Granada
Llegado este momento, toca descasar y disfrutar de otro de los encantos de Granada. Irse de vinos tapas. Hay tantos bares que cuesta elegir. Y todos están siempre a tope.
En verano invadidos por los turistas. Y en invierno abarrotados de estudiantes pues es importante destacar que Granada es una ciudad universitaria con mucho ambiente durante el curso escolar. rebosante de jóvenes con ganas de calle y de fiesta a quienes no asusta el gélido aire del invierno que llega desde la cercana Sierra Nevada. Con esto lo que quiero advertir es que Granada en invierno suele hacer mucho frío, tenlo en cuenta al hacer la maleta.
Para ir de vinos y tapas, a mi personalmente, me gusta empezar la ruta por la cuesta de Gomérez. O mejor, por la plaza de Bibarrambla, donde se respira la mejor esencia de granadina. Es esta plaza también buen lugar donde empezar el día, y donde tomar un fantástico desayuno.
Seguimos la ruta del tapeo por la Plaza Nueva, la más antigua de la ciudad. Otro punto neurálgico por el que, seguro, pasarás en varias ocasiones mientras estés en Granada.

Antes de pedir en el bar lo que quieres, una pequeña lección de vocabulario. Son típicos de Granada los requetés, (pinchitos de melva con pimientos), las pipirranas (ensaladas de tomate, pepino, pimiento y cebolla…). Para beber, ¿qué tal un tinto de verano bien fresquito…?
También me gusta mucho refugiarme del gentío en las terrazas que hay alrededor de la Plaza de Toros, más alejadas del centro, poco frecuentadas por los turísticas pero las favoritas de muchos lugareños.

Volvemos al centro para hacer otra parada obligada, esta vez en busca de sabores más dulces. Y nos vamos a la “heladería italiana” donde te aconsejo pidas ara un helado de cassata, una de sus especialidades. Eso sí, fíjate en curioso sistema de fichas, necesarias para hacer tu pedido en la barra. Otra opción dulce y muy típica en esta capital andaluza son los piononos.
El Albaicín y el mirador de San Nicolás
Al atardecer, toca dedicárselo al evocador barrio donde la esencia de todo lo árabe seduce al visitante; el Albaicín. Pasear por estas calles es una maravilla.
Entramos por una calle de nombre literario: el Paseo de los Tristes, la cual corre a orillas del río Darro. Y luego, un consejo. Apaga el móvil, olvídate del reloj. Y concentra todos los sentidos en el disfrute de este laberinto lleno de callejuelas empinadas, tortuosas y estrechas flanqueadas por casas blancas, impolutas. Eso sí, prepara la cámara pues te vas a volver loco haciendo fotos.

Sube y baja por las infinitas escaleras, descubre plazas arboladas. Siéntate en una de las muchas terrazas, compra recuerdos en alguna de las abundantes tiendas de “souvenirs” y artesanía… y mira siempre hacia arriba pues al fondo, en todo momento compañera, verás altiva la silueta de la Alhambra.
No dejes de pasar por el mirador de San Nicolás. Lo reconocerás por la multitud que allí se da cita y con razón. Dicen que es uno de los mejores lugares del mundo donde contemplar la puesta de sol.

RECOMENDADO: RUTA POR ALBAICÍN Y SACROMONTE!
Descubre lo mejor de los barrios del Albaicín y el Sacromonte con un guía que te enseñará los rincones más hermosos y te contará las historias más curiosas.
Merece la pena. Ambos son barrios laberínticos y complicados. Si no vas con alguien que te oriente y te abra las puertas de algunos rincones no vas a enterarte de nada.
Las cuevas del Sacromonte
Pegadito al Albaicín, otro barrio muy auténtico: el Sacromonte. Donde el aire flamenco se sobrepone a la esencia islámica. De los palacios ornamentados a las cuevas más sencillas. Del estricto Corán al alegre tablao.
Recorre el Sacromonte a pie, o bien atraviesa estas calles contemplando el espectáculo desde las entrañas de alguno de los autobuses urbanos que cruzan el barrio. Ante la duda, no dejes de preguntar a los lugareños. Los granadinos son los mejores embajadores de su adorada ciudad.

Nadie mejor para contarte el último chascarrillo, aconsejarte sobre el mejor recorrido. Y no te dejes convencer por esa leyenda urbana que habla de la “mala follá” que dicen tienen los de Graná (así llaman ellos a su ciudad). Yo al menos no la he percibido. Más bien todo lo contrario.
Las huellas de Federico García Lorca y de Falla
Acabo este post con dos propuestas más, estas con un sabor más poético.
¿Sabías que fue aquí, en Granada, donde Federico García Lorca escribió su famoso Romancero Gitano, o su Casa de Bernarda Alba? Efectivamente. La que fue la casa de la familia, en el barrio de la Huerta de San Vicente, hoy es un museo lleno de manuscritos, objetos personales del poeta, dibujos…

Otro genio que ha dejado huella en Granada es el músico Manuel de Falla. Aunque nació en Cádiz, pasó más de veinte años en Granada. En su casa-jardín, cercana la Alhambra, hoy reconvertida en museo, todo se conserva tal y como el compositor lo dejó.
Para rematar un texto sobre Granada nada mejor que un verso dedicado a esta ciudad que a tantos artistas ha inspirado.
Como sé que la visita seguro te ha sabido a poco, acabo con una frase que creo resume bien el sentir que deja este destino en el corazón del viajero: “Hay un placer todavía mayor que el de ver Granada. Y es el de volverla a ver”, palabras que, me cuentan, pronunció Alejandro Dumas padre hace ya muchos años.

Termino con otra frase, esta de Ernest Hemingway, que por supuesto también estuvo por aquí: “Si tuviéramos que visitar una sola ciudad en España, esa debería ser Granada”.
No se si me atrevería a ser tan rotunda pero de lo que no cabe duda es de que a Granada hay que ir, al menos, una vez en la vida. Sí o sí. Un destino más a sumar en la lista de “Imprescindibles de La Viajera“.
¿ALGO QUE COMENTAR? ¿Nos cuentas tu experiencia en Granada? ¿Algún consejo que añadir? No olvides que las experiencias de los demás nos enriquecen a todos y nos ayudan a conocer otros puntos de vista sobre los destinos. ¡Deseando conocer tu opinión sobre esta maravillosa ciudad!


4 Comments
laviajeraempedernida
Meli, gracias por tus apreciaciones. Ya aclarado lo que me comentas en el texto.
Meli
Lo primero es que la foto que pone fachada de Granada es la iglesia del Sagrario, es otro edificio. La capilla real no está dentro de la catedral es anterior y es otro aunque sea un ensamblado de edificios. El conjunto catedralicio son la catedral, iglesia del Sagrario y capilla real pero son tres edificios diferentes.
Además que tambien se refiere a la Alhambra como un palacio y eso sería su 10%, la Alhambra era una ciudad palatina.
José Antonio
Quizás ha faltado el mejor piropo a Granada que yo conozco, los versos grabados en el muro al pie de la Torre de la Vela del poeta mejicano Francisco de Asís de Icaza:
Dale limosna mujer
que no hay en la vida nada
como la pena de ser
ciego en Granada
Dicen que fue una mujer, llamada Beatriz de León, y un invidente que pedía limosna arrodillado y en silencio junto a la Puerta de la Justicia los que motivaron estos versos del poeta.
Marta Mayfer
¡Genial el post sobre Granada! Sobre todo por la mención a los artistas!!